Blogia
profesorjosemolina

GUÍA ELEMENTOS DEL DISEÑO - ARTES VISUALES - OCTAVO A

ELEMENTOS DEL DISEÑO

COLOR - LUZ Y SOMBRA - FORMA Y VOLUMEN

OBJETIVO

Los estudiantes podrán aplicar y combinar elementos del lenguaje visual en trabajos de arte y diseño con diferentes propósitos expresivos y creativos.

FUN DAMENTO

La creación de las imágenes está relacionada con la manera en la que se utilizan diversos elementos, éstos pueden ser de configuración o de organización. Para este nivel se estudiarán el color, el uso de la luz y la sombra, las formas abstractas y el volumen.

COLOR

El color es una cualidad que posee todo aquello que podemos ver y que nos ayuda a reconocerlo. Es un fenómeno físico que se produce por la acción de la luz y la propiedad que tienen los cuerpos de absorber o reflejar parte de la misma. Por ejemplo, cuando la luz blanca atraviesa un prisma de cristal, se descompone en los colores del espectro (violeta, azul, verde, amarillo, naranja y rojo) que son los que regularmente utilizamos. Por tal motivo, se dice que la luz es la suma de todos los colores. Los colores de dicho efecto se pueden observar en una burbuja de jabón o en un arcoíris. Llamamos colores puros o primarios, a aquellos que no pueden obtenerse por la mezcla de otros. Gracias a éstos es posible generar múltiples combinaciones. Existen básicamente dos tipos de colores primarios: colores-luz y colores-pigmento. Los colores-luz son aquellos que son intangibles; no pueden ser tocados físicamente. Estos son: el rojo, el verde y el azul. Los colores-pigmento son aquellos en los que se trabaja el color como materia y los podemos tocar físicamente. Estos son: cian, amarillo y magenta. El color tiene una relación muy estrecha con las sensaciones y emociones debido a que se les asocia con ciertos significados. Por ejemplo, el rojo está ligado con el fuego, el amor o la sangre; el verde con la naturaleza y la vida. Asimismo, cuando se hace referencia a la temperatura del color se habla de la sensación que éste provoca al cuerpo. Existen los colores cálidos que engloban al rojo, el amarillo y el naranja y los colores fríos que son el azul y el verde. Sin embargo, las sensaciones y emociones que los colores provocan a quien observa, así como el significado que se le otorga, dependen del entorno cultural del creador y del espectador. En el mundo cromático se pueden diferenciar tres dimensiones básicas del color que permiten analizar cualquier composición: el tono, el valor y la saturación. El tono es el nombre específico que se da a cada color, que ordenados en la secuencia de rojo, naranjo, amarillo, verde, azul y violeta conforman el círculo cromático. El valor es la claridad del color, su grado de proximidad al color blanco. Al modificar el valor, podemos obtener diferente gama de colores, es decir, diferentes matices de un mismo color. Y la saturación es el grado de pureza que tiene un color. Los colores más saturados son los que más se aproximan a los colores básicos o primarios La composición por medio del color produce efectos muy variados. Los colores complementarios son parejas de colores compuestas por los colores opuestos en el círculo cromático. Son el rojo con el verde, el azul con el naranja y el amarillo con el violeta. Si disponemos juntos en una composición colores complementarios, el resultado es de un gran contraste, lo que le da un carácter llamativo y reclama la atención del observador. Los colores armónicos son aquellos que se encuentran en proximidad inmediata en el círculo cromático. Por ejemplo, el naranja y el rojo, o el azul y el verde. Cuando utilizamos los colores armónicos en una composición, el paso de unos a otros es gradual y sin grandes contrastes, por lo que el resultado es de una agradable tranquilidad. Luz y sombra La luz es una forma de energía que actúa sobre nuestros ojos y nos hace ver los objetos. En el estudio de las artes visuales interesan los efectos que produce la luz sobre los objetos. Gracias a la percepción de superficies iluminadas que contrastan con otras superficies en sombra, reconocemos el volumen de las cosas que nos rodean. De forma semejante, cuando dibujamos en una superficie plana zonas de mayor claridad junto a otras más oscuras, reproducimos los efectos de la luz y representamos la corporeidad de los objetos. Los efectos de la luz sobre los objetos son muy diferentes si se trata de la luz solar o de la luz artificial. En el caso de la luz natural o solar, la radiación se configura por rayos paralelos entre sí. En el caso de la luz artificial, se configura por rayos divergentes. Los efectos producidos por la luz también dependen de la posición desde donde están iluminados los objetos. Con la luz frontal centrada conseguimos un efecto de relieve poco notorio. La luz lateral realza todos los matices tridimensionales de los volúmenes. La luz enfocada en la parte posterior del objeto, produce un efecto de contraluz en el que se subraya la silueta de la figura. Llamamos sombra a la parte de un objeto iluminado que no recibe directamente rayos de luz. Con respecto a un cuerpo iluminado se pueden diferenciar tres clases de sombras: La sombra propia, que es la que corresponde a las zonas no iluminadas del objeto. La sombra proyectada, que es la imagen oscura que un cuerpo opaco iluminado proyecta sobre otra superficie u objeto diferente. La sombra autoproyectada, que es la que alguna parte del objeto arroja sobre otra parte del mismo objeto. En la realidad, las zonas iluminadas y las zonas en sombras no son completamente uniformes. Dentro de las partes iluminadas, como dentro de las que permanecen en sombra, existen grados de luz y oscuridad. Esta dualidad entre luz y sombra, así como los infinitos matices que entre ellas existen, es lo que se conoce como claroscuro. La correcta utilización de este recurso gráfico contribuye a dotar de mayor expresividad, fuerza plástica y naturalismo a la representación de figuras en una composición artística. El pintor español José de Rivera es un buen representante del uso del claroscuro. FORMA La creación de formas visuales está supeditada al grado de realismo (entendido como la forma de presentar las cosas tal como son) o abstracción (simplificación de la forma y/o ausencia de representación de cosas) que se emplee para representarlas. Formas abiertas son aquellas cuyos contornos son indefinidos y se tienden a integrar al fondo. Formas cerradas son aquellas cuyos contornos están claramente definidos y delimitados. En el arte, las formas figurativas son aquellas que representan aspectos de la realidad de manera fiel, que representan la realidad concreta como personas, animales y objetos, aunque en ocasiones sólo toman algunos rasgos estructurales de las formas. Formas no figurativas son aquellas formas que no representan la realidad, también se le denomina abstractas. La abstracción es simplificación, es eliminar algo. Existen diversos modos de representación abstracta. Aquellas en las que se utilizan formas geométricas y otras en las que se exaltan las formas orgánicas, a través del color y la línea por encima de la figuración. Se insiste en que la apariencia de las cosas no siempre reproduce el verdadero contenido de ellas.

VOLUMEN

El volumen es el espacio real ocupado por un cuerpo. Se trata pues de una realidad en tres dimensiones, largo, ancho y alto. Las esculturas son representaciones tridimensionales. Su volumen permite apreciarlas desde distintos puntos a diferencia de las representaciones bidimensionales que sólo las podemos apreciar de frente. La escultura, de acuerdo con lo que representa, puede dividirse en estatuaria y ornamental. La escultura estatuaria es aquella que representa la forma humana y la ornamental se ocupa de todos aquellos temas que no están relacionados con la figura humana. Ambas representaciones pueden ser de dos tipos: de bulto redondo y de relieve. La escultura en bulto redondo es la que puede contemplarse desde cualquier punto de vista, debido a que sólo está adherida a una base. La escultura de relieve, es aquella que se apoya en un muro u otra superficie, es decir está “adosada” y sólo puede contemplarse por el frente. Otras técnicas son volumen lleno, técnica en la que el volumen no presenta espacios y es compacto, y el volumen vacío, técnica que aparece con los movimientos de vanguardia del siglo XX que consiste en introducir espacios en la escultura. Un buen representante de esta técnica es el escultor contemporáneo Henry Moore. Una de las características más significativas de su obra es el valor que da al hueco que se hace expresivo y forma parte esencial de la misma. La masa se destaca por contraste con los huecos. Opone con maestría los volúmenes cóncavos y convexos. El espacio forma parte de la obra. Todo lo anterior conduce a reconocer que el color, la luz y sombra, las formas y el volumen sirven como elementos no solo de configuración, sino también expresivos, que permiten a los alumnos tener experiencias enriquecedoras. Si experimentan uno a uno, podrán reconocer todas las posibilidades que les brinda para expresar sus ideas, sentimientos, y emociones.

BIBLIOGRAFÍA UTILIZADA

Programa de Estudio Artes Plásticas, Ministerio de Educación, Chile. Morales, O. (1970). El niño y su expresión plástica. Crespi y Ferrerio, (1995). Léxico técnico de las Artes Plásticas. Marín, R. (2003). Didáctica de la Educación Artística. Madrid: Prentice Hall.

0 comentarios